Molly Gilmore tenía una buena vida antes de que pronunciara esas dos estúpidas palabras. Mientras se prepara para graduarse de la escuela de cocina y acumula el valor para hacer un movimiento sobre su sexy instructor de repostería con olor a galletas dulces, Marco, no puede esperar a finalmente tener la genial vida que siempre ha soñado, en lugar de la vida simplemente buena que ha tenido.
Siempre conocida como la ninja silenciosa, tiene toda la intención de permanecer oculta en las sombras de su loca familia, así no tendrán ninguna oportunidad para avergonzarla alrededor del hombre del que ha estado enamorada por dos años. Por desgracia, su familia tiene otros planes. Cuando la sacan por completo de su zona de confort, se encuentra mirando el más loco choque de trenes que ha visto jamás.
Molly definitivamente obtiene una vida más emocionante que no gira alrededor de la escuela, pero está muy segura de que el hombre de sus sueños no se quedara durante mucho tiempo después de que su familia lo atrape. No hay muchos chicos que puedan aguantar oler a orines, que todo el mundo sepa cómo se masturban y el ser forzado a comer toda una bolsa de penes.
Unete a la pandilla de Chocolate Lovers y Chocoholics para la última historia de amor, repostería, malas decisiones en la vida, y el recordar lo importante que es la familia, incluso cuando te vuelven loco.
Principalmente porque es ilegal matarlos.
Mil gracias a LDC!
Siempre conocida como la ninja silenciosa, tiene toda la intención de permanecer oculta en las sombras de su loca familia, así no tendrán ninguna oportunidad para avergonzarla alrededor del hombre del que ha estado enamorada por dos años. Por desgracia, su familia tiene otros planes. Cuando la sacan por completo de su zona de confort, se encuentra mirando el más loco choque de trenes que ha visto jamás.
Molly definitivamente obtiene una vida más emocionante que no gira alrededor de la escuela, pero está muy segura de que el hombre de sus sueños no se quedara durante mucho tiempo después de que su familia lo atrape. No hay muchos chicos que puedan aguantar oler a orines, que todo el mundo sepa cómo se masturban y el ser forzado a comer toda una bolsa de penes.
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